Se fue a resolver unos problemas personales y ya ni siquiera coge el teléfono a los directivos del club

Mamady Dianga, jugador malí con pasaporte francés del Villanovense,  lleva aproximadamente un mes sin dar señales de vida. Un hecho de indisciplina que ha provocado que la junta directiva le cierre las puertas para vestir de nuevo la elástica verde.

Mamady, que fue uno de los fichajes estrella del conjunto serón en la pretemporada, y que como admite el presidente, José María Tapia, “seguro que es uno de los mejores futbolistas que han pasado por aquí, ya que tenía unas cualidades excepcionales”, habló con la directiva y les explicó que tenía una serie de problemas personales.

Ante esta situación, la directiva decidió darle unos días de descanso para que solucionara estos problemas, sin embargo desde entonces no se ha vuelto a saber nada del jugador. “Antes cogía el teléfono y ya ni eso”, afirma el vicepresidente del Villanovense, Francis Chamizo, que indica que incluso le prestó dinero de su bolsillo para que pudiera afrontar estos problemas personales, pero aún no se lo ha devuelto.

Tapia afirma que Mamady “creo que se equivocó de club, y no se adaptó nunca a la forma de vivir en Villanueva, ni cuajó con sus compañeros, que eso también era importante”.

El presidente recuerda que a principios de temporada “tuvo una lesión muscular, que le llegó porque casi no entrenaba, ya que tenía un concepto diferente del fútbol y se pensaba que todo era jugar los domingos y ya está”.

Por todo ello, y “ante esta forma de proceder con el club y con la afición, puedo asegurar a un 99,9% que Mamady no volverá a vestir la camiseta del Villanovense aunque decidiera venir ya”.

Mamady no ha llegado a disputar ningún partido oficial con el Villanovense esta temporada, después de lesionarse en el partido amistoso frente al Sevilla Atlético en el 'Romero Cuerda' --en la imagen de arriba, un momento de ese encuentro--